CARTELERÍA DIGITAL… ¿Conectamos?
El mundo está conectado. Las conversaciones han superado la barrera del contacto físico, ampliándose al ámbito de lo digital. Ahora, más que nunca, los contactos nacen, crecen y se desarrollan a tiempo real. Atrás quedan los tiempos en los que las conversaciones se extendían a lo largo de días e, incluso, meses, obligadas por los ciclos postales.
Hoy, vivimos en un mundo donde la inmediatez se ha adueñado de nuestras vidas. Hasta el punto, que un segundo puede marcar la diferencia entre un éxito o un fracaso, entre ser o no ser, entre estar o no estar… Una vorágine que también está transformando radicalemente los modelos y formatos de la comunicación publicitaria. Y es, en este campo, donde la transformación se acelera a marchas forzadas. La crisis ‘del papel’, parece centrar la atención de quienes trabajan proyectando la imagen de las marcas. Los usuarios están cada vez más conectados a la red, y los soportes tradicionales parece que decaen bajo el peso de las nuevas tecnologías.
Este es el caso de la ‘cartelería digital’ (digital signage), que ha desembarcado en el mundo off line con una clara intención de quedarse e imponerse. Frente al valor de lo estático, la cartelería digital ha incorporado un factor dinámico que favorece el engagement con el público. El dinamismo de las propuestas, su capacidad para interactuar con los usarios y la posibilidad de ‘reaccionar a tiempo real’ –respondiendo con mensajes personalizados-, ha cambiado radicalmente la concepción del mensaje publicitario. Ahora las marcas disponen de un amplio campo creativo y estratégico, basado en la visualización dinámica de sus mensajes. Del modelo de comunicación unidireccional que plantea la cartelería impresa, hemos pasado a un nuevo estadío, en el que el medio se convierte en un nuevo canal de conversación y conversión con el público.
De este modo, las empresas disponen de soportes que no sólo les permiten ‘informar’, sino que además ahora pueden ‘comunicarse’, integrando el medio dentro de la esfera de contacto digital del usuario. Pantallas que permiten conectar con las necesidades de quienes interactúan con ellas, respondiendo de manera activa y estableciendo un canal de conversación directo y eficaz; modelos creativos que se activan en el momento adecuado, invitando a la participación… Son algunos ejemplos que, a día de hoy, ya forman parte de nuestra realidad cotidiana.
Tanto es así, que la cartelería digital se sitúa como uno de los modelos de negocio con mayor proyección en los próximos años. Su rápida evolución augura un inminente cambio en la percepción de los usuarios, que ya empiezan a asumirla como una ‘extensión natural’ de su propio entorno digital. Por este motivo, es muy importante ‘ponerse al día’, actualizando nuestros conocimientos sobre este soporte, e incoporarlo a nuestro portfolio de servicios. Porque, sin lugar a dudas, el futuro de la comunicación publicitaria pasará, sí o sí, por la cartelería digital. Ahora bien, para no perder ese carro hace falta responder de inmediato.
Bienvenidos al tiempo real… ¿Conectamos?